Esta imagen de San Maximiliano Kolbe, la he realizado con
la técnica de telas encoladas y masillas epoxídicas. Está hecha con la misma
técnica que se han utilizado para hacer las imágenes de la Dulce Espera, Santa
Bernardita, Madre Teresa, Santa Clara de Asís, Padre Damián o Juan Pablo II,
entre otros. ¿Cómo se hace? te lo cuento ahora por si no leíste algunos de los
trabajos anteriores. En cuatro pasos básicos la realizaremos. Atención: tómate
tu tiempo para cada uno de ellos. Nunca apures las cosas, esto es como la buena
fruta, precisa un tiempo para madurar y así será espléndida.
1- Se comienza con la cabeza, los
pies y las manos. Ideando la ropa (para esto es preciso ver estampas u otras
estatuas para que nos quede muy bien) y las actitudes de la imagen que le
queramos dar (esto lleva bastante tiempo). Se va pensando en todos los detalles
que se le quieren hacer (ubicación de las manos, de los pies, capucha,
cinturón, Rosario, etc.).
2- Se parte de un soporte (que
puede ser de alambre, madera, plástico, cartón, telgopor, etc. Al que se le van
marcando las partes del cuerpo. TENER EN CUENTA LAS PROPORCIONES. En un QUI
DOCET, DISCIT (1º de septiembre de 2011), te conté sobre las proporciones
corpóreas más comunes que debes tener en cuenta a la hora de hacer una imagen.
Se van añadiendo pequeñas almohadillas con algodón para darle volumen a las
partes del cuerpo. Como es un varón, le damos un poco más a la caja torácica y
a la espalda y menos para las caderas. Se pinta la cara y las manos. Se añade
la cabeza y se la fija con masilla epoxídica. Se pinta la base, en este caso es
de madera, se barniza y se la protege con papel film para que no se manche.
3- Se corta la vestimenta en tela
de algodón o lino (NO SINTÉTICO). A todas estas partes se les pasan una mezcla
de cola de carpintero, tiza, enduído y colorantes. Por lo menos 2 manos y de
ambos lados. El orden de armado es: mangas, túnica, capilla y capucha. Dejar
secar muy bien entre tela y tela, lo mismo cuando se pinta, DEJAR SECAR MUY
BIEN ENTRE MANO Y MANO. Nos vamos ayudando con alfileres para mantener a cada
tela en su lugar. Aprovechamos para ir haciendo el rosario que llevará la
imagen. Una vez que esté totalmente pintada, se procederá a la decoración con
los distintos elementos, en este caso lo haré sosteniendo unas revistas del
Caballero de la Inmaculada, en polaco y japonés, creadas por San Maximiliano.
Siempre lo último en poner es la aureola.
4- Sacar el papel adherente de la
base, cara y manos. Seguir decorando con otros detalles (cinturón con nudos,
rosario y aureola). Retocar con pigmentos al tono las marquitas que hubiéramos
dejado y retocar con los colores apropiados para crear sombras. Trabajo
terminado y listo para exponer.
PAZ Y BIEN para todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario