Esta imagen de Santa Teresita del Niño Jesús está hecha en yeso betalfa . Los pasos fueron los siguientes:
1) Diagramar la cabeza (querían que fuera solamente un busto), ponerle ojos de vidrio y enduído con cola de carpintero para tapar cortes. Les cuento que para poner los ojos hay que rebanar toda la cabeza y con mucha paciencia ir calando los espacios orbiculares “desde adentro de la cabeza hasta afuera” y queda como una máscara.
2) Obviamente nuestras infaltables y aburridas lijas de distintos granos. Como les decía es la tarea más pesada y tediosa, pero hay que reconocer que el resultado final depende de este paso.
3) Diagramar el hábito con masilla (para agregarle algunos detalles más, o en este caso el escudo del Carmelo).
4) Pintar con pigmentos naturales (mínimo 5 manos) y retocar detalles.
5) Aplicar 2 manos de barniz semimate.
Les cuento que Santa Teresita de Lisieux, escribió su autobiografía, se llama “HISTORIA DE UN ALMA”, es un libro sin desperdicios, ahí uno puede hacerse una idea de lo que era, ni más ni menos que una GRAN SANTA.
Si alguien quiere leer una pequeña biografía de ella fíjense en la imagen que hice de ella entelada, ahí la van a poder encontrar.
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